Escribir es reescribir
¿Por qué escribir debe ser reescribir?
“Escribir es reescribir” es una fómula que revela un aspecto difícil del aprendizaje de la escritura: volver sobre la primera versión del propio texto, revisarla varias veces para mejorarla y afinar la versión definitiva.*
¿Cómo escriben los que saben escribir?
Hay alumnos que revisan poco su texto y prestan sólo atención a problemas externos y superficiales del borrador, como por ejemplo, la ortografía. Agunos se imaginan que escribir es crear un texto bien elaborado a la primera. Estos alumnos, obviamente, tienen poca experiencia como escritores de textos.
Las clases de Español son oportunidades para aprender que la acción de escribir textos es un proceso laborioso, lleno de idas y venidas, a lo largo del cual el texto escrito es objeto de reescrituras constantes.
El texto escrito en su primera versión debe ser visto como un borrador, como el primer intento, como un punto de partida que permite ir más allá en la elaboración del pensamiento y en la precisión de la comunicación.
Enseñar a escribir a través de secuencias didácticas
La elaboración de textos como escritura y reescritura constituye uno de los principios fundamentales de nuestros libros de texto expresadas en las secuencias didácticas de cada proyecto.
La idea es preparar a los alumnos para hacer de su propio escrito un objeto de trabajo a fin de juzgarlo, analizarlo, transformarlo y mejorarlo, como si se tratara del texto de otra persona.
Se puede decir que los proyectos didácticos se ponen en marcha para hacer del primer texto realizado por los alumnos un mero borrador para mejorar la escritura del texto definitivo; en otras palabras, el reto de las secuencias didácticas es conseguir hacer, de un primer texto inicial, un medio y soporte para precisar el pensamiento, para afinar la imaginación y para desarrollar la claridad de la expresión.
El marco teórico se apoya en una concepción del aprendizaje de la escritura que busca procedimientos que contribuyen a la transformación de las capacidades iniciales de los alumnos.
Desde esta visión, las secuencias didácticas buscan desarrollar en los alumnos una relación consciente y voluntaria con sus textos escritos y permitirles elaborar una representación de la actividad de la escritura como el producto esperado del proyecto en cuestión.
Actividades para enseñar a escribir en el marco de una secuencia didáctica
La producción inicial, “borrador” o “primera versión”, pone a los alumnos en situación de redactar un texto que saben que hay que retomar, mejorar, transformar, o incluso reescribir completamente de otra forma.
Cada secuencia didáctica permite a los alumnos volver sobre su texto inicial con el fin de mejorar su primer texto de manera consciente. La redacción de la producción final les permite aplicar sus aprendizajes. Trabajar sobre un texto ya existente contribuye a hacerles descubrir y aprender que un texto puede ser un punto de partida que se puede mejorar. Los alumnos aprenden así a considerar su propio texto como un objeto transformable y a contemplar la tarea de reescritura como una parte integrante de la escritura.
Revisión de textos redactados por parejas o en grupo
Una actividad de preparación a la reescritura, realizada frecuentemente en el marco de las secuencias didácticas, consiste en la lectura crítica de textos redactados por otras personas.
Bajo distintas formas, los textos producidos en clase, especialmente las primeras versiones, son objeto de un intercambio entre los alumnos y se discuten en grupo a partir de unos criterios concretos. Tales actividades contemplan varios objetivos vinculados a la reescritura:
- Lograr que los alumnos consideren la escritura como una actividad social que pasa siempre por el examen minucioso de la lectura crítica de otras personas antes de hacerse público.
- Leer los textos de otro, como medio interesante para detectar las imperfecciones de un texto realizando una lectura crítica para intentar mejorarlos. Esto se consigue más fácilmente sobre un texto ajeno, pues cada cual considera su texto como una proyección de sí mismo al exterior, por lo que resulta difícil distanciarse y criticarlo, mientras que el texto de otra persona es más fácil de evaluar, discutir, criticar y mejorar.
- Desenfocarse del propio punto de vista. Al revisar un texto escrito por otra persona, el lector desempeña el papel de un primer destinatario, lo que facilita la descentración.
- Mejora de textos escritos por otros. Al recibir un texto que plantea problemas y que es necesario mejorar, también se aprende.
Conclusión: La reescritura, como parte inherente a la escritura, es el producto de una construcción lenta que puede ejercerse durante toda la escolaridad, incluso desde edades muy tempranas. Aprender a reescribir un texto significa utilizar la escritura como medio para escribir, tomar el texto como punto de partida hacia otro texto siempre mejor, distanciarse en relación con su propia producción lingüística, considerar el propio texto como si se tratara del texto de otro, como un objeto externo y modificable.
Referencias
Cassany, D. (2000) Reparar la escritura. Didáctica de la corrección de la escritura.Editorial Graó. España.
Cassany, D. (2002). La cocina de la escritura. SEP y Fondo de Cultura Económica. México.
Díez, A. (Coord.) (2000). Aprendizaje de la lectoescritura desde una perspectiva constructivista. Vol, I y II. Editorial Graó. España.
Lerner, D. (2001). Leer y escribir en la escuela. SEP-Fondo de Cultura Económica (Biblioteca para la actualización del maestro), México.
* Joaquim Dolz y Bernard Schneuwly: La reescritura en las secuencias didácticas para la expresión escrita en
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